Consejos sobre Mayordomía Cristiana

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Para un estudio adicional

Los diezmos y las ofrendas en Israel.—Historia de los Patriarcas y Profetas, 564-568.

El diezmo existía antes del tiempo de Moisés.—Joyas de los Testimonios 1:372.

Es tan duradero como la ley de Dios.—Joyas de los Testimonios 1:385.

Tal como el sábado el diezmo es sagrado.—Joyas de los Testimonios 1:375.

Un arreglo preciso hecho por Jesucristo mismo.—Joyas de los Testimonios 3:35.

No ha sido abrogado ni reducido.—Joyas de los Testimonios 1:371.

A cargo de la conciencia y generosidad de los hombres.—Joyas de los Testimonios 1:373.

Un reconocimiento de su derecho por la creación y la redención.—Joyas de los Testimonios 3:77-80.

Dios pone su mano sobre nuestras posesiones: “Conságrame tus diezmos”.—Testimonies for the Church 9:245.

Un asunto de sencilla honradez.—La Educación, 133, 134.

Dios aborrece el espíritu de codicia.—Los Hechos de los Apóstoles, 272, 273.

La liberalidad no es una gracia natural sino cultivada.—Testimonies for the Church 5:271, 272.

El mensaje de Malaquías.—Joyas de los Testimonios 3:35-42.

Nadie debe robar a Dios siguiendo las inclinaciones del corazón egoísta.—Testimonies for the Church 5:481.

Al usar el diezmo para pagar deudas seculares, el hombre se hace doblemente deudor.—Joyas de los Testimonios 3:41; Testimonies for the Church 1:220.

Cuando estamos en armonía con Dios no preferiremos a nadie antes que él.—Testimonies for the Church 6:103, 104.

Se estorba el mensaje cuando se detienen los diezmos.—Testimonies for the Church 9:52.

El resultado de pagar fielmente los diezmos.—Joyas de los Testimonios 1:368; Joyas de los Testimonios 3:36; Joyas de los Testimonios 1:552-554; Los Hechos de los Apóstoles, 272.

Abundancia de recursos para llevar a cabo la obra de Dios.—Joyas de los Testimonios 2:41.

Una prueba para ver si somos dignos de la vida eterna.—Joyas de los Testimonios 1:390.

Adversidad a causa de la retención egoísta.—Testimonies for the Church 1:221; Joyas de los Testimonios 1:564; Testimonies for the Church 4:484, 620; Testimonies for the Church 2:661, 662; Testimonies for the Church 5:151, 152.

No hay excusa para la ignorancia o el descuido.—Joyas de los Testimonios 3:37, 38; Testimonios para los Ministros, 310-312.

Considerado como robo en los libros del cielo.—Joyas de los Testimonios 1:373, 374.

Cuando se paga el diezmo, lo que queda es bendecido.—Joyas de los Testimonios 1:556.

Las nueve décimas valen más que las diez décimas.—Joyas de los Testimonios 1:385.

Promesa de prosperidad a los fieles.—Testimonies for the Church 5:267, 268.

Reclamando la promesa de Malaquías.—Testimonios para los Ministros, 313.

Traed con confesión los diezmos retenidos.—Testimonies for the Church 9:51, 52.

Pedid que los diezmos sean llevados a la tesorería antes de fin de año.—Testimonios para los Ministros, 310-313.

Se pide arrepentimiento y restitución.—Joyas de los Testimonios 1:374.

El diezmo es exclusivamente para el ministerio.—Testimonies for the Church 9:249, 250; Obreros Evangélicos, 238.

Los profesores de Biblia deben ser pagados con el diezmo.—Joyas de los Testimonios 2:415.

Los presidentes de asociaciones y ministros tienen el deber de educar.—Testimonies for the Church 5:374, 375; Testimonies for the Church 9:250; Testimonios para los Ministros, 310-313.

Enseñad por precepto y ejemplo.—Testimonies for the Church 9:246.

Los que dejan de enseñar no son considerados sin culpa.—Testimonies for the Church 3:269, 270; Testimonios para los Ministros, 312.

Hay que enseñar la liberalidad sistemática a los pobres.—Obreros Evangélicos, 234, 235.

En caso de duda es preferible exceder las exigencias del deber más bien que sustraer de ellas.—Joyas de los Testimonios 1:564.