Elena G. de White en Europa

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Segunda serie de reuniones en Escandinavia

Un congreso en Suecia y Dinamarca

El congreso de 1886 de la Asociación Sueca estaba programado para fines de junio, con una semana previa de reuniones para los obreros. Por lo tanto, dos semanas después de su viaje a Tramelan y de la gira por las iglesias suizas, Elena G. de White estaba otra vez en camino. En esta gira de seis semanas por los países escandinavos (desde el 15 de junio al 28 de julio) su poderosa influencia espiritual iba a ser vista y sentida por miles de personas. EGWE 216.1

Esta vez la acompañaron Sara McEnterfer y Cristina Dahl. Cristina vivía con la familia de Guillermo White, en Basilea, desde el mes de noviembre, y ahora iba a regresar junto a su familia en Cristianía. EGWE 216.2

Las viajeras partieron el martes 15 de junio. A la noche siguiente se encontraron con Guillermo en Hamburgo. El había viajado el día anterior para atender algunos asuntos de la casa editora en Leipzig. EGWE 216.3

Siguieron la misma ruta que en el viaje anterior: Hasta Kiel, Alemania, por tren, y luego tomaron el barco a Korsör, Dinamarca. Al llegar a Copenhague, pudieron alcanzar el barco que partía para Malmö, Suecia. EGWE 216.4

Cuando llegaron a Orebro, donde estaba la sede de la asociación, no hallaron a nadie esperándolos, pero un cochero sueco se mostró ansioso por “ayudarlos”. El hombre “parecía decidido a sacarnos las maletas de las manos”, comentó Elena G. de White, “pero las defendimos con valor. Aunque él hablaba con elocuencia en sueco, no le entendimos ni una sola palabra”. Carta 2, 1886. Eran aproximadamente las siete de la mañana, y decidieron caminar el kilómetro y medio que los separaba de la casa de la familia Jacobson, donde se habían alojado antes. Allí encontraron al pastor O. A. Olsen *, que había llegado hacía poco tiempo de Norteamérica para trabajar en Escandinavia. Los pastores Oyen y Matteson también estaban en casa de Jacobson. EGWE 216.5

Los hombres explicaron que habían estado esperando todos los trenes desde el día anterior, aunque creían que ellos no llegarían antes del mediodía. Para mayor seguridad, le habían dado instrucciones a un cochero sueco, a fin de que los llevara hasta allí en caso de que vinieran antes. ¡Pobre cochero! EGWE 217.1

Habían alquilado dos habitaciones amuebladas con una cocina, para la Sra. de White y Sara. “Encontramos excelente el lugar”, observó la Sra. de White, en tanto que concentraba su atención en la reunión de obreros que ya había comenzado. EGWE 217.2