Testimonios para la Iglesia, Tomo 8

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La naturaleza: clave de los divinos misterios

A medida que el estudiante contempla las cosas de la naturaleza, recibe una nueva visión de ellas. Las enseñanzas del libro de la naturaleza de Dios atestiguan la veracidad de su Palabra escrita. 8TPI 340.3

En el plan de la redención hay misterios que la mente humana no puede sondear, muchas cosas que la sabiduría humana es incapaz de explicar; pero la naturaleza nos puede enseñar mucho acerca del misterio de la piedad. Cada arbusto, cada árbol que lleva fruto, toda vegetación, contiene lecciones que aprender. En el crecimiento de la semilla se pueden leer los misterios del reino de Dios. 8TPI 340.4

Para el corazón enternecido por la gracia de Dios, el sol, la luna, las estrellas, los árboles, las flores del campo, pronuncian palabras aconsejadoras. La siembra de la semilla transporta la mente a la siembra de la semilla espiritual. El árbol declara que un buen árbol no puede llevar mal fruto, y que un árbol malo no puede llevar buen fruto. “Por sus frutos los conoceréis”. Mateo 7:16. Aun la cizaña nos enseña una lección. Satanás es el que la siembra y, si no se atiende, daña el trigo creciendo desordenadamente. 8TPI 340.5

Padres y madres, enseñad a vuestros hijos la maravillosa operación del poder de Dios. Su poder se hace patente en cada planta, en cada árbol que produce fruto. Llevad a los hijos al huerto y explicadles cómo Dios le da el crecimiento a la semilla. El agricultor cultiva la tierra y esparce la semilla, pero no puede hacerla germinar. Tiene que depender de Dios, quien hace lo que ningún poder humano puede hacer. El Señor infunde su propio Espíritu en la semilla, haciéndola brotar. Bajo su cuidado, el embrión brota a través de la cáscara que lo encierra para desarrollarse y llevar fruto. 8TPI 341.1

Al estudiar los niños el gran libro de texto de la naturaleza, Dios impresionará sus mentes. Al relatárseles la obra que él realiza por la semilla, ellos aprenden el secreto del crecimiento en la gracia. Debidamente entendidas, estas lecciones apuntan hacia el Creador, enseñándoles aquellas verdades sencillas y santas que acercan el corazón a Dios. 8TPI 341.2