Notas biográficas de Elena G. de White

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Una reunión en casa del Hno. Collier

Por la tarde fuimos a la casa del Hno. Collier, donde nos proponíamos celebrar una reunión esa noche. Le hicimos al Hno. Collier algunas preguntas sobre estos hombres, pero no nos dio ninguna información. “Si el Señor os envió aquí—dijo él—, vosotros descubriréis qué espíritus los gobierna, y nos resolveréis el misterio”. NBEW 89.2

Estos dos hombres asistieron a la reunión en la casa del Hno. Collier. Mientras yo oraba fervorosamente por luz y por la presencia de Dios, ellos comenzaron a gemir y exclamar: “¡Amén!”, aparentemente apoyando mi oración con su simpatía. Pero mi corazón se sintió inmediatamente oprimido con un gran peso. Las palabras morían en mis labios, y una oscuridad se difundió por todo el ambiente. NBEW 89.3

El pastor White dijo: “Estoy afligido. El Espíritu de Dios es agraviado. Yo resisto esta influencia en el nombre del Señor. Oh Dios, reprende este mal espíritu”. NBEW 89.4

Inmediatamente yo me sentí aliviada, y me elevé por encima de las tinieblas. Pero de nuevo, mientras hablaba palabras de ánimo y de fe a los que estaban presentes, sus gemidos y sus amenes me congelaban. Una vez más el pastor White reprendió el espíritu de las tinieblas, y de nuevo el poder de Dios descansó sobre mí mientras hablaba a la gente. Estos agentes del enemigo se vieron tan atados que les fue imposible ejercer nuevamente su funesta influencia aquella noche. NBEW 89.5

Después de la reunión el pastor White dijo al Hno. Collier: “Ahora puedo hablarle acerca de estos dos hombres. Ellos están actuando bajo una influencia satánica, y sin embargo atribuyen todo al Espíritu del Señor”. NBEW 90.1

“Yo creo que Dios os ha enviado para animarnos—contestó él—. Nosotros llamamos a esta influencia mesmerismo. Ellos dominan las mentes de otras personas de una manera notable, y han dominado a algunas personas para gran perjuicio de ellas. Raramente tenemos reuniones aquí; porque ellos aparecen entre nosotros, y nosotros no podemos tener unión alguna con ellos. Manifiestan un profundo sentimiento, como habéis observado esta noche, pero extraen y anulan la verdadera vida de nuestras oraciones, y dejan una influencia más negra que la oscuridad de Egipto. Nunca los he visto dominados hasta esta noche”. NBEW 90.2