Notas biográficas de Elena G. de White

258/288

“Levantaos y edificad”

Con el propósito de establecer un fuerte centro educacional en la sede de la denominación, los hermanos hallaron necesario hacer planes para reunir un fondo de 100.000 dólares. “La palabra de Dios a sus obreros de Washington es ésta: ‘Levantaos, y edificad’—escribió la Sra. White en uno de sus llamamientos publicados en favor de este fondo—; y la palabra de Dios a este pueblo en todas las asociaciones es: ‘Fortaleced las manos de los que edifican’. La obra en Washington ha de avanzar en línea recta, sin demora ni obstáculo. No se la detenga por falta de recursos”.12 NBEW 435.5

Noblemente los hermanos y hermanas del mundo entero respondieron a los pedidos de fondos para establecer un centro fuerte para la preparación de obreros en la capital de la nación; tan noblemente, de hecho, que cuando los delegados al congreso de la Asociación General de 1905 se reunieron en el hermoso bosque que había sido comprado en Takoma Park, y presentaron los donativos de las asociaciones para el cierre del fondo, hallaron que la suma fijada había sido sobrepasada, y que disponían de un superávit para usarlo como subvenciones a las misiones. NBEW 436.1

“Nos sentimos muy agradecidos a nuestro Padre celestial—declaró la Sra. White durante el congreso de 1905 en que se presentó el fondo—porque ha conmovido, mediante su Santo Espíritu, las mentes de los hermanos para dar tan liberalmente a favor del establecimiento de su obra en Washington... El pondrá su aprobación sobre los esfuerzos para adelantar su obra según los lineamientos que él mismo ha señalado”.13 NBEW 436.2