La Historia de la Redención

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Capítulo 55—Una firme plataforma

Vi un grupo que se mantenía en pie, en guardia y en posición firme, sin apoyar a los que querían perturbar la definida fe del cuerpo de Cristo. Dios los consideró con aprobación. Se me mostraron tres peldaños: los mensajes de los ángeles primero, segundo y tercero. Mi ángel acompañante dijo: “¡Ay de aquel que mueva una porción o sacuda un alfiler de estos mensajes! La correcta comprensión de ellos es de vital importancia. El destino de las almas depende de cómo sean recibidos”. HR 404.1

Nuevamente se me llamó la atención a los mensajes, y vi cuánto le había costado al pueblo de Dios obtener esta experiencia. La logró por medio de mucho sufrimiento y duro conflicto. Dios los condujo paso a paso, hasta que los puso sobre una plataforma firme e inconmovible. Vi que algunos se acercaban a la plataforma para examinar su fundamento. Algunos, con regocijo, subieron inmediatamente. Otros comenzaron a encontrarle fallas. Querían que se le introdujeran mejoras para perfeccionar la plataforma y lograr que la gente fuera mucho más feliz. HR 404.2

Algunos se bajaban para examinarla, y afirmaban que estaba mal ubicada. Pero vi que casi todos permanecían firmemente sobre ella y exhortaban a los que habían descendido para que dejaran de quejarse porque Dios era el gran Arquitecto y estaban luchando contra él. Recordaban la obra maravillosa de Dios, que los había conducido a esa firme plataforma, y al unísono alzaban los ojos al cielo y con voz sonora glorificaban al Señor. Esto afectó a algunos de los que se habían quejado y habían descendido y éstos, con aspecto humilde, volvieron a subir. HR 404.3