Mensajes Selectos Tomo 1

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No hay pretensión de infalibilidad

Tenemos muchas lecciones que aprender y muchísimas que desaprender. Sólo Dios y el cielo son infalibles. Quedarán chasqueados los que piensan que nunca tendrán que abandonar un punto de vista favorito, que nunca tendrán la ocasión de cambiar una opinión. Mientras nos aferremos a nuestras propias ideas y opiniones con persistencia determinada, no podremos tener la unidad por la cual oró Cristo.—The Review and Herald, 26 de julio de 1892. 1MS 42.2

Acerca de la infalibilidad, nunca pretendí tenerla. Sólo Dios es infalible. Su palabra es verdad y en él no hay cambio ni sombra de variación.—Carta 10, 1895. 1MS 42.3