La Oración

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Los ángeles esperan para responder a nuestras oraciones

En el cuidado del enfermo frecuentemente se da mucha atención a asuntos menores, mientras se olvida la necesidad que los pacientes tienen de las grandes verdades del evangelio, que son poderosas para sanar y que se debieran suministrar tanto al alma como al cuerpo. Cuando dejáis de ofrecer una oración por los enfermos, los estáis privando de grandes bendiciones; pues los ángeles de Dios están esperando para auxiliar a estas almas en respuesta a vuestras peticiones.—El ministerio médico, 255. Or 303.1

Antes de salir de la casa para ir a trabajar, toda la familia debe ser convocada y el padre, o la madre en ausencia del padre, debe rogar con fervor a Dios que los guarde durante el día. Acudid con humildad, con un corazón lleno de ternura, presintiendo las tentaciones y peligros que os acechan a vosotros y a vuestros hijos, y por la fe atad a estos últimos al altar, solicitando para ellos el cuidado del Señor. Los ángeles ministradores guardarán a los niños así dedicados a Dios.—Conducción del Niño, 491. Or 303.2