El Evangelismo

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Sermones impresos y otras publicaciones

El uso eficaz de publicaciones—La verdad debe ser publicada en forma mucho más extensa de lo que lo ha sido hasta ahora. Debe ser definida en rasgos claros y precisos delante de la gente. Debe ser proclamada con argumentos breves, pero concluyentes, y deben hacerse planes para que cada reunión en que la verdad ha sido presentada a la gente, sea seguida por la distribución de folletos. Hoy por hoy puede verse la necesidad de regalarlos, pero serán un poder para el bien, y nada se perderá. Ev 120.3

Los discursos dados en el púlpito serán mucho más eficaces si se hace circular material impreso, educando a los oyentes en las doctrinas de la Biblia. Dios hará que muchos estén dispuestos a leer, pero habrá muchos que también se rehusarán a ver u oír algo sobre la verdad presente. Pero no debemos ni aun pensar que estos casos están fuera de toda esperanza, pues Cristo está atrayendo a muchas personas hacia sí... Debéis avanzar con vuestras manos llenas con la debida clase de material de lectura y vuestro corazón lleno del amor de Dios.—Carta 1, 1875. Ev 120.4

Para prevenir los efectos de la oposición—Cuando se da un discurso, los oyentes pueden escuchar con interés, pero todo es extraño y nuevo para ellos, y Satanás está listo para sugerir a sus mentes muchas cosas que no son ciertas. Tratará de pervertir y presentar en forma falsa las palabras del orador. ¿Qué haremos nosotros? Ev 121.1

Los discursos que presentan las razones de nuestra fe deben ser publicados en pequeños panfletos y hechos circular tan ampliamente como sea posible.* Así las falsedades y presentaciones torcidas que el enemigo de la verdad constantemente trata de mantener en circulación, serían reveladas en su verdadero carácter, y la gente tendría una oportunidad de conocer con exactitud lo que el pastor ha dicho.—The Review and Herald, 14 de octubre de 1902. Ev 121.2

Discursos cortos impresos—Imprímase una sinopsis de los discursos y hágasela circular ampliamente.—Manuscrito 42, 1905. Ev 121.3

Volantes—Se ejercerá una gran influencia si es posible, durante una serie de reuniones, conseguir que una imprenta imprima folletos, volantes y resúmenes de las conferencias para ser distribuidos.—Testimonies for the Church 6:36 (1900). Ev 121.4

Algunos serán alcanzados solamente por las publicaciones—Muchísimo más puede ser hecho por parte del predicador diligente con la circulación de periódicos y folletos que solamente por la predicación de la Palabra sin las publicaciones... Muchas mentes no pueden ser alcanzadas de otra manera. He aquí una obra misionera verdadera en la cual pueden invertirse trabajo y medios con los mejores resultados.—Life Sketches, 217 (1915). Ev 121.5

El poder de la imprenta—La imprenta es un medio poderoso para conmover las mentes y los corazones de la gente. Los hombres mundanos se apoderan de la imprenta y aprovechan hasta el máximo cada oportunidad de ofrecer a la gente publicaciones cargadas de veneno. Si personas que están bajo la influencia del espíritu del mundo y de Satanás están ansiosas por hacer circular libros, folletos y revistas de naturaleza corrupta, vosotros deberíais estar mucho más ansiosos por presentar a la gente un material de lectura de excelente calidad y de poder salvador. Ev 121.6

Dios ha puesto al alcance de su pueblo las ventajas de la imprenta, la cual, combinada con otros medios, difundirá con éxito el conocimiento de la verdad. Hay que hacer circular folletos, revistas y libros según lo exija el caso, en todas las ciudades y las aldeas del país.—Life Sketches of Ellen G. White, 216, 217 (1915). Ev 122.1

Alas para la verdad—Hay una gran necesidad de hombres que puedan utilizar la prensa con ventaja, para que la verdad reciba alas a fin de volar a cada nación, lengua y pueblo.—Gospel Workers, 25 (1915). Ev 122.2

La página impresa—Aunque el ministro presente fielmente el mensaje, la gente no puede retenerlo todo. La página impresa es por lo tanto indispensable, no sólo para llamar la atención hacia la importancia de la verdad para este tiempo, sino también para arraigar y fortalecer a la gente en la verdad, y para afirmarla contra los errores engañosos. Las revistas y los libros son los medios que el Señor tiene para mantener el mensaje para este tiempo continuamente delante de la gente. Al esclarecer y confirmar a las almas en la verdad, las publicaciones llevarán a cabo un trabajo más grande del que puede realizar el ministerio de la Palabra obrando solo. Los mensajeros silenciosos que los colportores colocan en los hogares fortalecerán en todo sentido el ministerio evangélico, porque el Espíritu Santo obrará en las mentes a medida que éstas lean los libros, tal como impresiona las mentes de los que escuchan la Palabra predicada. El mismo ministerio de los ángeles que asiste la obra del ministerio también acompaña los libros que contienen la verdad.—Testimonies for the Church 6:315, 316 (1900). Ev 122.3