El Gran Movimiento Adventista
Ayuda del Señor
El Señor declara que él ha puesto delante de su pueblo “una puerta abierta, la cual nadie puede cerrar”. No es maravilla, entonces, que el mensaje ha avanzado firmemente. Es el mensaje de Dios al pueblo, y debe tener éxito. En Apocalipsis 7:2 la obra de preparar un pueblo para estar firme en el gran día de la ira de Dios que vendrá, está simbolizada por un ángel que “subía de donde sale el sol”, o como dicen algunas traducciones, “como el nacimiento del sol”. He aquí el amanecer del día: primero aparecen los rayos de luz en el este; estos se transforman en una mayor claridad hasta que se ve el amplio disco del sol. Como “el Rey del Día”, asciende al cenit, su luz, su calor, su poder se tornan cada vez más vívidos. GMA 385.2
Ciertamente tal ha sido el progreso del mensaje del tercer ángel desde 1848, cuando sus verdades constitutivas recibieron una forma definida, y desde ese punto hemos mostrado un crecimiento marcado y sostenido que es maravilloso. Esto podemos explicarlo solo porque el Señor está verificando su palabra a quienes en este tiempo, cuando la salvación está por llegar, guardan “el sábado para no profanarlo”,5 y alejan su pie de hacer su propio placer en el día santo de Dios, y así, por medio de la “fe de Jesús”, como se declara en el mensaje del tercer ángel de Apocalipsis 14, guardan todos “los mandamientos de Dios”. De los tales el Señor dijo por medio del profeta Isaías: “Entonces nacerá tu luz como el alba, y tu salvación se dejará ver pronto; e irá tu justicia [“Jehová, justicia nuestra” Jeremías 23:6] delante de ti, y la gloria de Jehová será tu retaguardia”. Isaías 58:8, 13.6 Con tal seguridad, ¿cómo podríamos esperar otra cosa sino que la obra fuera un éxito? “Si Dios está con nosotros, ¿quién contra nosotros?” GMA 386.1