El Gran Movimiento Adventista

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El testimonio de Pablo sobre los dones

La carta de Pablo a los Tesalonicenses muestra que el día del Señor –el día final del juicio ejecutivo− vendrá sobre las masas como “ladrón”, pero que no tomará así a los hijos fieles de Dios porque ellos son “hijos de luz e hijos del día”. Entre sus advertencias a ese pueblo vigilante dice: “No apaguéis al Espíritu. No menospreciéis las profecías. Examinadlo todo; retened lo bueno”.8 GMA 162.3

De la palabra griega profetéias, aquí traducido profecías, Greenfield, en su Greek Lexicon dice: “El ejercicio del don de profecía, en este sentido, 1 Tesalonicenses 5:20”. Con esto también concuerdan los diccionarios de Parkhurst, Robinson, y Liddell y Scott. Esto, entonces, es un testimonio claro de que el verdadero espíritu de profecía estará en la iglesia que espera la segunda venida de Cristo. La amonestación es a no despreciar el don, sino examinarlo; encontrar la buena manifestación, “retenerlo”.9 GMA 162.4