Elena De White: Mujer De Visión
MÁS QUE UNA PROFETISA
Elena fue más que una profetisa. Fue una consejera, una consoladora, guía, autora, escritora, oradora pública. MV 516.2
Toda su vida ella había encontrado oposición, antagonismo y crítica en todos los estilos y formas, desde lo trivial a lo serio. Fue citada y mal citada, interpretada y mal interpretada. Pero el valor de sus palabras se evidenció en escuelas, sanatorios e iglesias por todo el mundo. MV 516.3
Raramente se defendía a sí misma. Pero ahora en el ocaso de su vida se vio forzada a replicar a sus críticos. Fue una experiencia dolorosa para ella saber que había miembros de la familia de Dios que estaban bien familiarizados con ella y su trabajo pero que, en base a rumores y a evidencias endebles, habían perdido confianza en su misión profética. Abrumaba su corazón el hecho de que pudieran olvidar tan fácilmente las muchas evidencias que confirmaban la fe en su llamado y su obra. MV 516.4
¿Cuáles son algunas de esas evidencias que confirman la fe? MV 516.5
Los centenares de cartas que cruzaron miles de kilómetros de tierra o mar para llegar en un momento crítico. MV 516.6
Las muchas personas que recibieron cartas de consuelo sobre asuntos personales conocidos sólo por ellos y por Dios. MV 516.7
La cantidad de veces que encontró por primera vez a individuos a quienes reconoció, habiéndolos visto en visión. MV 516.8
La descripción de testigos presenciales fidedignos de los fenómenos que la acompañaban cuando estaba en visión en los primeros días de su trabajo. MV 516.9
La vida de líderes como Daniells, Bates, Loughborough, Haskell, cuyas dudas habían sido despejadas. MV 516.10
Se me ha indicado ahora que no debo ser estorbada en mi trabajo por aquellos que se ocupan en suposiciones respecto a su naturaleza, cuyas mentes están luchando con tantos problemas intrincados conectados con la supuesta obra de un profeta. Mi comisión abarca la obra de un profeta, pero no termina allí. Abarca mucho más que lo que las mentes de aquellos que han estado sembrando las semillas de incredulidad pueden comprender (Carta 244, 1906 [ver también 1MS, pp. 35',39]). MV 516.11
Battle Creek, donde el Dr. Kellogg y sus compañeros, incluyendo a Ballenger y A. T. Jones, estaban sembrando semillas de incredulidad, había sido el centro de la obra denominacional. MV 517.1