Mensajera del Señor

Marcando el rumbo en cuanto a las relaciones raciales

Como ocurrió con muchos otros asuntos denominacionales importantes, Elena de White estuvo a la vanguardia al trazar las dimensiones morales implicadas en las relaciones raciales como también para sugerir enfoques pragmáticos a fin de resolver los problemas durante tiempos difíciles. Richard Schwarz escribió que se “requirió una seria admonición de Elena de White para sacudir a los adventistas a fin de que comprendiesen su deber para compartir su fe con los afroamericanos”. 54 MDS 214.5

Antes de partir hacia Australia, en la sesión del congreso de la Asociación General de 1891 en Battle Creek, la Sra. White extendió su primer llamado público importante en favor de la obra evangelística entre los negros americanos. 55 Comprendiendo las restricciones crecientes que se estaban aplicando a los negros en todos los estados sureños, ella reconoció que se estaba metiendo en un tema explosivo, “pero no tengo intenciones de vivir como una cobarde o de morir como una cobarde”. 56 MDS 214.6

Ella señaló que “el nombre de un hombre negro está escrito en el libro de la vida junto al de un hombre blanco... Nacimiento, condición, nacionalidad o color no pueden elevar o degradar a los hombres”. Además dijo que aquellos que “desdeñan a un hermano a causa de su color están desdeñando a Cristo”. MDS 214.7

Luego se refirió al descuido de la iglesia, reconociendo con pena que “no hemos hecho un esfuerzo mayor por la salvación de las almas entre la gente de color”. Admitió que se estaba refiriendo a “problemas desconcertantes”, que se necesitaban tanto adventistas blancos como negros para educar a millones que habían sido oprimidos por tanto tiempo, y que los obreros de la iglesia en el Sur “no deben llevar las cosas a extremos y caer en el fanatismo en este asunto”. 57 MDS 214.8

Uno de los primeros en sentir el desafío fue James Edson White, hijo de Elena de White. 58 Creativo, enérgico, impresor capacitado y compositor de himnos, Edson se unió a Will Palmer para producir The Gospel Prí- mer (El Silabario del Evangelio), que ellos usaron (1) para levantar fondos, (2) para enseñar a leer a los analfabetos y (3) para enseñar las verdades de la Biblia en un lenguaje sencillo. MDS 214.9

Sabiendo que los blancos del Sur no les darían la bienvenida, especialmente si ellos vivían con negros, hicieron construir un buque de vapor fluvial (llamado Morning Star [Estrella de la Mañana]), que por varios años se convirtió en su vivienda, su planta impresora y su capilla. Este esfuerzo concertado para ayudar a cumplir los objetivos del llamado de Elena de White en 1891, siguió adelante con poco apoyo de los fondos denominacionales. Pero la tenacidad de Edson, unida al aliento de su madre, dieron como resultado el establecimiento de una presencia adventista a lo largo del río Yazoo, en Nashville, Tennessee, y en Vicksburg, Mississippi. 59 MDS 215.1

La Sra. White vio la cuestión de la diferencia de color en dimensiones más amplias que la mayoría de sus contemporáneos. En una serie de diez artículos publicados en la Review and Herald,60 después que Edson había comenzado su trabajo, ella extendió una apelación a los miembros de la iglesia: “Ninguna mente humana debiera tratar de trazar la línea entre la gente de color y los blancos. Que las circunstancias indiquen lo que habrá de hacerse, porque el Señor tiene su mano en la palanca de las circunstancias. A medida que la verdad sea presentada a las mentes de la gente de color y de los blancos, y las almas se conviertan cabalmente, llegarán a ser nuevos hombres y mujeres... Aquellos que están convertidos entre los blancos experimentarán un cambio en sus sentimientos. El prejuicio que han heredado y cultivado hacia la raza de color se extinguirá gradualmente”. 61 MDS 215.2

Elena de White cerró el primero de la serie de diez artículos con un llamado y una palabra de advertencia: “Como pueblo debiéramos hacer más por la raza de color en América de lo que hemos hecho hasta ahora. En la obra necesitaremos avanzar con cuidado, siendo dotados con sabiduría de lo alto”. 62Los nueve artículos restantes volvían a destacar los conceptos generales del primer artí7410culo, con varias sugerencias sobre cómo familias blancas debieran trasladarse a los estados del Sur para compartir con los negros su conocimiento de agricultura y de otros oficios. El objetivo era guiar a los negros para que desarrollasen sus programas de esfuerzo propio. MDS 215.3

Pero pronto cambiaron los tiempos y las circunstancias. Los años finales del siglo XIX y la primera década del XX presenciaron una contramarcha, con espíritu de venganza, de cualesquiera hayan sido las ganancias que los negros habían disfrutado desde la emancipación. Durante este período emergió el sistema vergonzoso y rígido de la segregación, dando comienzo a lo que se ha llamado la “traición del negro”. Algunos se han referido a este período como “la larga noche oscura”, que duró hasta 1923. 63En 1913, el presidente de los Estados Unidos todavía estaba segregando los edificios de oficina federales en la capital de la nación. En 1890 Mississippi fue el primer estado en eliminar el derecho de voto de los negros; pronto le siguieron siete estados. El linchamiento llegó a ser un fenómeno racial del Sur; algunos negros fueron quemados en la estaca. Tanto en el Norte como en el Sur ocurrieron grandes disturbios raciales. MDS 215.4

¿Se contradijo Elena de White? ¿Colocaba las velas dependiendo de cómo estaba soplando el viento cuando en 1908 les dijo a miembros de iglesia, blancos y negros, que los negros no debieran esperar o demandar igualdad social y que los negros y los blancos debieran adorar en edificios segregados? Eso suena realmente como una Elena de White diferente de la dirigente valiente y perspicaz de la primera mitad de la década de 1890. MDS 215.5

La respuesta a tales críticas a Elena de White se encuentra al observar varios hechos: (1) Durante este período su hijo Edson estaba demostrando los principios que su madre había estimulado. El y sus asociados estaban trabajando durante el tiempo de sombras oscuras cuando la segregación racial de “Jim Crow” estaba barriendo el Sur [“Jim Crow” era el nombre de un antiguo estribillo musical que encerraba un mensaje despreciativo de discriminación contra los negros o de segregación respecto a ellos; se usó este epíteto para referirse a las leyes que pusieron en vigor la segregación racial en el Sur de los Estados Unidos entre 1877 y la década de 1950]. La madre de Edson mantuvo un contacto estrecho con él y en base a esta correspondencia podemos comprender de qué lado estaba su corazón. Durante estos tiempos sumamente difíciles, la madre y el hijo, casi sin ayuda, mostraron a la Iglesia Adventista cómo trabajar en los estados sureños. MDS 215.6

(2) Las circunstancias rápidamente cambiantes en los estados sureños requerían un consejo oportuno e inequívoco de parte de la mensajera de Dios, quien pudo ver el desarrollo en el cuadro completo, Elena de White nunca abogó para que se propiciase la llegada del tiempo de angustia antes de su momento. 64 Reconoció que el amanecer de un día mejor iluminaría eventualmente esa oscura noche de la vergonzosa opresión de los negros, pero “pura esta hora” debían ser “prudentes como serpientes, y sencillos [inofensivos] como palomas”. Las medidas de precaución por las que abogó Elena de White debían “seguirse hasta que el Señor nos mostrase un camino mejor”. 65 Ella exhortó a ser valientes porque “Dios está desnudando su brazo para hacer una obra poderosa en este campo misionero dentro de los límites de nuestro propio país”. 66 MDS 216.1

(3) El consejo de Elena de White durante este período espantoso de la historia de los Estados Unidos refleja una sabiduría más que humana. La flexibilidad es una señal de sabiduría cuando los tiempos y las circunstancias cambian. El hecho de estar entonces viviendo en Australia le impidió leer los periódicos cotidianos de ese período. Sin embargo, vio claramente las implicaciones de la nueva opresión de los negros. La obra evangelística en favor de los blancos estaba en peligro si éstos interpretaban adversamente movimientos o pasos “equivocados” en el trabajo por los negros. Y los negros estarían en mayor peligro si blancos hostiles pensaban que los negros estaban “saliendo” de su esfera social al responder a los evangelistas blancos. 67 El cuadro complete que Elena de White siempre mantuvo ante la iglesia fue el de honrar a Dios mediante un firme progreso en la obra de alcanzar a los que honestamente buscan la verdad, sean blancos o negros, aunque a veces el ritmo de ese avance fuese más lento debido a las circunstancias inmediatas. Su predicción de que los tiempos cambiarían ciertamente infundió esperanza a los que estaban luchando durante esa noche oscura. MDS 216.2

(4) Las instrucciones de Elena de White a la iglesia, dadas mediante consejos y el ejemplo, prepararon el camino para que los adventistas trabajaran en los estados sureños cuando las circunstancias cambiasen: (a) Ella creía en la igualdad de todas las razas; (b) Ella claramente no fomentaba la creencia prevaleciente de parte de muchos en sus días que la raza negra era inferior genéticamente. A menudo lo decía: “Encontrarán ignorancia deplorable. ¿Por qué? Porque a las almas que estuvieron sujetas en esclavitud se les enseñó a hacer exactamente la voluntad de aquellos que los consideraban su propiedad, y los retenían como esclavos... Ahora bien, están aquellos que son inteligentes. Muchos no han tenido oportunidad y podrían haber manifestado una indudable capacidad si hubiesen sido bendecidos con oportunidades como las que han tenido sus hermanos más favorecidos, los blancos”. 68 En otras palabras, quítense la esclavitud y sus resultados inevitables, déseles a los negros las mismas oportunidades que a los blancos, y como consecuencia la así llamada ignorancia se desvanecerá. MDS 216.3

Elena de White habría sido mejor comprendida a lo largo de los años en cuanto al tema de las relaciones raciales si se hubiesen estudiado la totalidad de sus declaraciones en el contexto de su tiempo. Las tensiones raciales adventistas se habrían reducido grandemente si sus lúcidos principios hubiesen moldeado las decisiones personales y de la organización. Otis B. Edwards, un educador de color que por mucho tiempo se dedicó a la enseñanza, puede haberlo dicho de la mejor manera: “Tal vez el mayor estímulo para los esfuerzos misioneros en favor del negro provino... de la Sra. Elena G. de White”. 69 MDS 216.4