Search for: sábado
9781 Maranata: El Señor Viene, p. 252.4 (Ellen Gould White)
… del sábado... Vi que no sabíamos qué significaba subir sobre las alturas de la tierra y ser alimentados con la heredad de Jacob. Pero cuando desciendan de la …
9782 Maranata: El Señor Viene, p. 253.1 (Ellen Gould White)
… del sábado, brillaba más que todos, porque el sábado fue puesto aparte para que se lo guardase en honor del santo nombre de Dios. El santo sábado resplandecía …
9783 Maranata: El Señor Viene, p. 253 (Ellen Gould White)
El sábado es la señal de Dios, 26 de agosto
9784 Maranata: El Señor Viene, p. 253.2 (Ellen Gould White)
Santificad mis días de reposo [sábados], y sean por señal entre mí y vosotros, para que sepáis que yo soy Jehová vuestro Dios. Ezequiel 20:20 .
9785 Maranata: El Señor Viene, p. 254.1 (Ellen Gould White)
… reposo [sábado] consagrado a Jehová; cualquiera que trabaje en el día de reposo [sábado], ciertamente morirá. Guardarán, pues, el día de reposo [sábado] los hijos …
9786 Maranata: El Señor Viene, p. 256.5 (Ellen Gould White)
… , a saber, cumplir la obra del juicio y hacer expiación por todos los que resulten tener derecho a ella.— Seguridad y Paz en el Conflicto de los Siglos, 533, 534 .
9787 Maranata: El Señor Viene, p. 258.3 (Ellen Gould White)
… no sabéis cuándo será el tiempo”. “Y si no velares, vendré a ti como ladrón, y no sabrás en qué hora vendré a ti”. Marcos 13:33; Apocalipsis 3:3 .— Seguridad y Paz en el Conflicto …
9788 Maranata: El Señor Viene, p. 261.5 (Ellen Gould White)
No sabéis adónde seréis llamados a dar vuestro testimonio en favor de la verdad. Muchos deberán comparecer ante asambleas legislativas; algunos tendrán …
9789 Maranata: El Señor Viene, p. 263.3 (Ellen Gould White)
… debéis saber si vuestros pies están afirmados en la Roca eterna. Debéis tener una experiencia individual, y no depender de otros para vuestra luz. Cuando …
9790 Maranata: El Señor Viene, p. 270.6 (Ellen Gould White)
… semana, sabed que ha llegado el tiempo cuando Dios actuará. Se levantará en su majestad y sacudirá terriblemente la Tierra. Saldrá de su lugar para castigar …
9791 Maranata: El Señor Viene, p. 272.2 (Ellen Gould White)
Pero acerca de los tiempos y de las ocasiones, no tenéis necesidad, hermanos, de que yo os escriba. Porque vosotros sabéis perfectamente que el día del Señor vendrá así como ladrón en la noche. 1 Tesalonicenses 5:1, 2 .
9792 Maranata: El Señor Viene, p. 276.6 (Ellen Gould White)
… del sábado para observar el primer día de la semana, quedaría la gente en libertad para matarlos.— Primeros Escritos, 282 .
9793 Maranata: El Señor Viene, p. 277.5 (Ellen Gould White)
… el sábado del cuarto mandamiento, y honrar el primer día, o perder la vida. Pero ellos no cederán, ni pisotearán el sábado del Señor para honrar una institución …
9794 Maranata: El Señor Viene, p. 280.4 (Ellen Gould White)
… no sabe que la suerte de cada uno de ellos ha sido resuelta en el santuario celestial. Tiene conocimiento exacto de los pecados que les ha hecho cometer y los …
9795 Maranata: El Señor Viene, p. 283.4 (Ellen Gould White)
… ira, sabiendo que tiene poco tiempo”. Apocalipsis 12:12. Temibles son las escenas invocadas por esta exclamación de la voz celestial. La ira de Satanás aumenta …
9796 Maranata: El Señor Viene, p. 284.5 (Ellen Gould White)
… del sábado al domingo y manda a todos que santifiquen el día bendecido por él. Declara que aquellos que persisten en santificar el séptimo día blasfeman …
9797 Maranata: El Señor Viene, p. 288.1 (Ellen Gould White)
… Dios saben lo que significa esa nube.— Manuscrito 1, 1860 .
9798 Maranata: El Señor Viene, p. 289.2 (Ellen Gould White)
… el sábado se levantaron, glorificados, de sus polvorientos lechos, para escuchar el pacto de paz que Dios iba a hacer con quienes habían observado su ley.— Primeros …
9799 Maranata: El Señor Viene, p. 289.3 (Ellen Gould White)
Los que duermen en Jesús serán llamados de la casa de su prisión... a una gloriosa inmortalidad... [El Señor] ha resucitado, queridos amigos, y en vuestro desaliento podéis saber que...Jesús está a vuestro lado para daros paz.
9800 Maranata: El Señor Viene, p. 293.4 (Ellen Gould White)
Dije entonces: “Byron, desciende pronto... Acércate a la cabeza [de la yegua] y háblale. Los caballos deben saber que no eres tú quien los castiga”. Al oír esto, bajó en seguida. Yo añadí: “May Lacey y Sara, salgan”. Lo hicieron...