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2901 Reina Valera 1989 — Isaías 28:11
11 ¡Ciertamente, con balbuceo de labios y en otro idioma hablará Dios a este pueblo!
2902 Reina Valera 1989 — Isaías 28:12
12 A ellos había dicho: “Este es el reposo; dad reposo al cansado. Este es el lugar de descanso.” Pero ellos no quisieron escuchar.
2903 Reina Valera 1989 — Isaías 28:13
13 Por lo cual, la palabra de Jehovah para ellos será: “Mandato tras mandato, mandato tras mandato; línea tras línea, línea tras línea; un poquito allí, un poquito allí; para que vayan y caigan de espaldas y sean quebrantados, atrapados y apresados.”
2904 Reina Valera 1989 — Isaías 28:14
14 Así que, oh escarnecedores que gobernáis este pueblo en Jerusalén, escuchad la palabra de Jehovah.
2905 Reina Valera 1989 — Isaías 28:15
15 Porque habéis dicho: “Hemos realizado un pacto con la muerte; con el Seol hemos hecho un convenio. Cuando pase el torrente arrollador, no llegará a nosotros; porque hemos puesto al engaño como nuestro refugio, y en la mentira nos hemos escondido.”
2906 Reina Valera 1989 — Isaías 28:16
16 Por tanto, así ha dicho el Señor Jehovah: “He aquí que yo pongo como cimiento en Sion una piedra, una piedra probada. Una preciosa piedra angular es puesta como cimiento. El que crea no se apresure.
2907 Reina Valera 1989 — Isaías 28:17
17 Pondré el derecho por cordel y la justicia por nivel. El granizo barrerá el refugio del engaño, y las aguas inundarán su escondrijo.
2908 Reina Valera 1989 — Isaías 28:18
18 Entonces vuestro pacto con la muerte será anulado, y vuestro convenio con el Seol no prevalecerá. Cuando pase el torrente arrollador, seréis aplastados por él.
2909 Reina Valera 1989 — Isaías 28:19
19 Cada vez que pase, os arrebatará; porque pasará mañana tras mañana, de día y de noche. Entonces entender el mensaje sólo traerá terror.”
2910 Reina Valera 1989 — Isaías 28:20
20 La cama es demasiado corta para estirarse sobre ella, y la manta es demasiado estrecha para envolverse en ella.
2911 Reina Valera 1989 — Isaías 28:21
21 Porque Jehovah se levantará como en el monte Perazim, y se enardecerá como en el valle de Gabaón, para hacer su obra, su rara obra; para hacer su trabajo, su extraño trabajo.
2912 Reina Valera 1989 — Isaías 28:22
22 Ahora pues, no sigáis haciendo escarnio, para que no se aprieten más vuestras ataduras. Porque he oído, de parte del Señor Jehovah de los Ejércitos, que sobre toda la tierra ha sido decretada la destrucción.
2913 Reina Valera 1989 — Isaías 28:23
23 Estad atentos y escuchad mi voz; prestad atención y escuchad mi dicho:
2914 Reina Valera 1989 — Isaías 28:24
24 ¿Acaso para sembrar, el labrador sólo ara, rompe y deshace los terrones de tierra durante todo el día?
2915 Reina Valera 1989 — Isaías 28:25
25 Después de haber emparejado la superficie, ¿no esparce el eneldo, arroja el comino y pone el trigo en franjas, la cebada en su lugar y el centeno en el borde?
2916 Reina Valera 1989 — Isaías 28:26
26 Su Dios le enseña y le instruye en cuanto a lo que es correcto:
2917 Reina Valera 1989 — Isaías 28:27
27 que el eneldo no se trilla con el trillo, ni sobre el comino se hace rodar la rueda de la carreta; sino que el eneldo se golpea con un palo, y el comino con una vara.
2918 Reina Valera 1989 — Isaías 28:28
28 Por cierto, no se muele el grano indefinidamente, ni se lo trilla sin fin. Pero haciendo pasar la rueda de la carreta, lo esparce y no lo tritura.
2919 Reina Valera 1989 — Isaías 28:29
29 También esto procede de Jehovah de los Ejércitos, maravilloso en designios y grande en logros.
2920 Reina Valera 1989 — Isaías 30:28
28 Su aliento, cual torrente desbordado, llega hasta el cuello para zarandear a las naciones en la zaranda hasta acabar con ellos, y para sujetar las mandíbulas de los pueblos con freno que les haga errar.