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204 Mente, Carácter y Personalidad 2, p. 71 (Ellen Gould White)

Cada niño debe tener su individualidad

205 Mente, Carácter y Personalidad 2, p. 71.1 (Ellen Gould White)

Se puede disciplinar a un niño para que no tenga voluntad propia, como si fuera un animal, con su individualidad sumergida en la de su maestro [...]. Pero, en la medida …

206 Mente, Carácter y Personalidad 2, p. 71 (Ellen Gould White)

El matrimonio no debe destruir la individualidad

207 Mente, Carácter y Personalidad 2, p. 71.2 (Ellen Gould White)

Ni el marido ni la mujer deben pensar en ejercer gobierno arbitrario uno sobre otro. No intenten imponer sus deseos uno a otro. No pueden hacer esto y conservar …

208 Mente, Carácter y Personalidad 2, p. 71 (Ellen Gould White)

Ambos cónyuges deben conservar su individualidad (consejo para los recién casados)

209 Mente, Carácter y Personalidad 2, p. 71.3 (Ellen Gould White)

En su unión para toda la vida, sus afectos deben contribuir a su felicidad mutua. Cada uno debe velar por la felicidad del otro, esa es la voluntad de Dios para ustedes.

210 Mente, Carácter y Personalidad 2, p. 71.4 (Ellen Gould White)

Aunque deben vincularse completamente hasta ser uno, ninguno de los dos debe perder su individualidad. Dios es quien posee su individualidad; y a él deben …

211 Mente, Carácter y Personalidad 2, p. 71.5 (Ellen Gould White)

Su amor por lo humano debe ser secundario a su amor a Dios. La abundancia de su amor debe dirigirse hacia Aquel que dio su vida por ustedes. El alma que vive para …

212 Mente, Carácter y Personalidad 2, p. 71.6 (Ellen Gould White)

Tenemos una individualidad que nos es propia, y la de la esposa nunca debe sumergirse en la de su esposo.— Manuscrito 12, 1895 .

215 Mente, Carácter y Personalidad 2, p. 389.1 (Ellen Gould White)

… ”. Salmos 71:9, 17-18. David sentía la necesidad de precaverse contra los males que acompañan a la senectud.— Joyas de los Testimonios 1:172, 173 (1864) .

216 Mente, Carácter y Personalidad 2, p. 433.3 (Ellen Gould White)

Cualquier hábito o práctica que debilite los nervios, las facultades del cerebro o la fuerza física, descalifica para el ejercicio de la gracia que viene después de la temperancia: la paciencia.— Nuestra Elavada Vocacion, 71 (1884) .

219 Mente, Cáracter y Personalidad 2, p. 779.3 (Ellen Gould White)

… ”. Salmos 71:9, 17-18. David sentía la necesidad de precaverse contra los males que acompañan a la senectud.— Joyas de los Testimonios 1:172, 173 (1864) .