Mensajes Selectos Tomo 3

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Capítulo 2—La unidad en la iglesia

Presentad un frente unido

El testimonio de todo creyente en la verdad ha de ser uno. Todas vuestras pequeñas diferencias, que hacen surgir el espíritu combativo entre los hermanos, son artimañas de Satanás para distraer las mentes del asunto grande y terrible que tenemos delante. La verdadera paz se producirá en el pueblo de Dios cuando por medio de un celo unido y la oración ferviente se perturbe en alto grado la falsa paz que existe. Ahora hay un ferviente trabajo que hacer. Ahora es el tiempo en que podéis manifestar vuestras cualidades de soldados; que el pueblo del Señor presente un frente unido a los enemigos de Dios, de la verdad y la justicia... 3MS 21.1

Cuando el Espíritu Santo fue derramado sobre la iglesia temprana, “la multitud de los que habían creído era de un corazón y un alma”. Hechos 4:32. El Espíritu de Cristo los hizo uno. Este es el fruto de permanecer en Cristo... 3MS 21.2

Necesitamos la iluminación divina. Todo individuo está luchando para llegar a ser un centro de influencia, y hasta que Dios no trabaje por su pueblo no verán que la subordinación a él es la única seguridad para toda alma. Su gracia transformadora en los corazones humanos conducirá a la unidad, una unidad que todavía no ha sido lograda, pues todos los que son asimilados por Cristo estarán en armonía los unos con los otros. El Espíritu Santo creará unidad.—Carta 25b, 1892. 3MS 21.3