Mensajes Selectos Tomo 3

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No ha de seguirse un plan rígido en la educación

El Señor exige que cada persona que acepta responsabilidades ponga en ejercicio capacidades inteligentes y educadas, y desarrolle sus ideas en forma consciente de acuerdo con su previo conocimiento y servicio en la obra de las escuelas. El Señor no ha determinado que se use un plan definido, especial y exacto en la educación. Es el temor de Jehová lo que constituye el principio de la sabiduría. Cuando hombres, con sus variados rasgos de carácter, asumen la tarea señalada como maestros, y siguen un plan de enseñanza que esté de acuerdo con sus propias capacidades, ellos no han de suponer que éste debe ser una copia de aquellos maestros que los han precedido, no sea que arruinen su propia utilidad.—Manuscrito 170, 1901. 3MS 259.3