Reina Valera 1989
1Crónicas 16
1 Así trajeron el arca de Dios y la colocaron en medio de la tienda que David había erigido para ella. Luego ofrecieron holocaustos y sacrificios de paz delante de Dios.
2 Cuando David acabó de ofrecer los holocaustos y los sacrificios de paz, bendijo al pueblo en el nombre de Jehovah.
3 Entonces repartió a todos los de Israel, tanto a hombres como a mujeres, a cada uno una torta de pan, una de dátiles y una de pasas.
4 También puso delante del arca de Jehovah a servidores de entre los levitas para que invocasen, dieran gracias y alabasen a Jehovah Dios de Israel:
5 Asaf era el jefe; el segundo después de él era Zacarías; y luego Jeiel, Semiramot, Yejiel, Matatías, Eliab, Benaías, Obed-edom y Jeiel, con instrumentos, arpas y liras. Asaf tocaba los címbalos resonantes.
6 También los sacerdotes Benaías y Yajaziel tocaban continuamente las trompetas delante del arca del pacto de Dios.
7 Aquel mismo día, por primera vez, David ordenó cantar este salmo de acción de gracias a Jehovah, por medio de Asaf y sus hermanos:
8 ¡Dad gracias a Jehovah! ¡Invocad su nombre! Dad a conocer entre los pueblos sus hazañas.
9 Cantadle, cantadle salmos; hablad de todas sus maravillas.
10 Gloriaos en su santo nombre; alégrese el corazón de los que buscan a Jehovah.
11 Buscad a Jehovah y su poder; buscad continuamente su rostro.
12 Acordaos de las maravillas que ha hecho, de sus prodigios y de los juicios de su boca,
13 oh vosotros, descendientes de Israel, su siervo; hijos de Jacob, sus escogidos.
14 El es Jehovah, nuestro Dios; en toda la tierra están sus juicios.
15 Acordaos para siempre de su pacto—de la palabra que mandó para mil generaciones—,
16 el cual hizo con Abraham, y de su juramento a Isaac.
17 El lo confirmó a Jacob por estatuto, como pacto sempiterno a Israel,
18 diciendo: “A ti daré la tierra de Canaán, como la porción que poseeréis.”
19 Cuando eran pocos en número, muy pocos y forasteros en ella;
20 cuando andaban de nación en nación y de un reino a otro pueblo,
21 no permitió que nadie los oprimiese; más bien, por causa de ellos castigó a reyes.
22 Dijo: “¡No toquéis a mis ungidos, ni hagáis mal a mis profetas!”
23 ¡Cantad a Jehovah, toda la tierra! Anunciad de día en día su salvación.
24 Contad entre las naciones su gloria, entre todos los pueblos sus maravillas;
25 porque grande es Jehovah, y digno de suprema alabanza. El es temible sobre todos los dioses;
26 porque todos los dioses de los pueblos son ídolos, pero Jehovah hizo los cielos.
27 Gloria y esplendor hay delante de él; poder y alegría hay en su morada.
28 Dad a Jehovah, oh familias de pueblos, dad a Jehovah la gloria y el poder.
29 Dad a Jehovah la gloria debida a su nombre; traed ofrendas y venid ante su presencia; adorad a Jehovah en la hermosura de la santidad;
30 tiemble ante su presencia toda la tierra. Ciertamente ha afirmado el mundo, y no será movido.
31 ¡Alégrense los cielos, y gócese la tierra! Que digan entre las naciones: “¡Jehovah reina!”
32 ¡Ruja el mar y su plenitud! ¡Regocíjese el campo, y todo lo que hay en él!
33 Entonces cantarán con júbilo los árboles del bosque delante de Jehovah, porque él viene para juzgar la tierra.
34 ¡Alabad a Jehovah, porque es bueno; porque para siempre es su misericordia!
35 Y decid: “¡Sálvanos, oh Dios de nuestra salvación! Reúnenos y líbranos de las naciones, para que confesemos tu santo nombre, para que nos gloriemos en tus alabanzas.”
36 ¡Bendito sea Jehovah Dios de Israel, desde la eternidad hasta la eternidad! Y todo el pueblo dijo: “¡Amén!” Y alabó a Jehovah.
37 David dejó allí, delante del arca del pacto de Jehovah, a Asaf y a sus hermanos, para que sirviesen continuamente delante del arca, e hicieran cada cosa en su día;
38 también a Obed-edom y a sus sesenta y ocho hermanos. Y puso como porteros a Obed-edom hijo de Jedutún y a Hosa.
39 Asimismo, puso al sacerdote Sadoc y a sus hermanos los sacerdotes delante del tabernáculo de Jehovah que estaba en el lugar alto de Gabaón,
40 para que ofrecieran holocaustos a Jehovah continuamente en el altar del holocausto, al amanecer y al atardecer, conforme a todo lo que está escrito en la ley de Jehovah que él mandó a Israel.
41 Con ellos estaban Hemán, Jedutún y otros escogidos que fueron designados por nombre, para alabar a Jehovah, porque para siempre es su misericordia.
42 Con ellos estaban Hemán y Jedutún con trompetas, címbalos resonantes y otros instrumentos para el canto de Dios. Y los hijos de Jedutún fueron designados para la puerta.
43 Después todo el pueblo se fue, cada uno a su casa, y David se volvió para bendecir su casa.