Servicio Cristiano

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Invitad a la gente a reuniones evangélicas

Hay muchas cosas que pueden hacerse si solamente se dedica algún pensamiento a la obra. Muchos hay que no irán a la iglesia para escuchar la verdad predicada. Por medio de esfuerzos personales realizados con sencillez y sabiduría, éstos pueden ser persuadidos a dirigir sus pasos a la casa de Dios. La convicción puede dominar sus mentes en la primera oportunidad en que escuchan un discurso sobre la verdad presente. Si vuestras súplicas fueran rechazadas, no os desaniméis; perseverad hasta que el éxito corone vuestros esfuerzos.—The Review and Herald, 10 de junio de 1880. SC 162.4