La Iglesia Remanente

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Capítulo 3—Organización y desarrollo

Hace aproximadamente cuarenta años que se estableció la organización entre nosotros como pueblo. Yo fui una de las personas que tuvieron que ver con su afianzamiento desde el comienzo. Conozco las dificultades que hubo que afrontar, los males que estaba llamada a corregir, y he vigilado la influencia de la organización con respecto al crecimiento de la causa. En la primera etapa de la obra, Dios nos dio luz especial sobre este punto, y esta luz, junto con las lecciones que la experiencia nos ha enseñado, debe ser motivo de cuidadosa consideración. IR 27.1

Desde el comienzo nuestra obra fue agresiva. Eramos pocos, y nuestros hermanos pertenecían mayormente a la clase más pobre. Nuestras creencias eran casi desconocidas para el mundo. No teníamos casas de culto, sino unas pocas publicaciones, y muy limitadas facilidades para llevar adelante nuestra obra. Las ovejas estaban esparcidas por los caminos y los vallados, por ciudades, pueblos y bosques. Los mandamientos de Dios y la fe de Jesús eran nuestro mensaje. IR 27.2