La Fe por la Cual Vivo

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Julio—El santuario de Dios

El señor está en este lugar, 1 de julio

Y despertó Jacob de su sueño, y dijo: Ciertamente Jehová está en este lugar, y yo no lo sabía. Y tuvo miedo, y dijo: ¡Cuán terrible es este lugar! No es otra cosa que casa de Dios, y puerta del cielo. Génesis 28:16, 17. FV 190.1

“La verdadera reverencia hacia Dios nos es inspirada por un sentido de su infinita grandeza y un reconocimiento de su presencia. Este sentido del Invisible debe impresionar profundamente todo corazón. La presencia de Dios hace que tanto el lugar como la hora de la oración sean sagrados. Y al manifestar reverencia por nuestra actitud y conducta, se profundiza en nosotros el sentimiento que la inspira. ‘Santo y temible es su nombre’ (Salmos 111:9, V.M), declara el salmista. Los ángeles se velan el rostro cuando pronuncian ese nombre. ¡Con qué reverencia debieran pronunciarlo nuestros labios, puesto que somos seres caídos y pecaminosos! FV 190.2

“¡Cuán apropiado sería que jóvenes y ancianos ponderasen las palabras de la Escritura que demuestran cómo debe considerarse el lugar señalado por la presencia especial de Dios! Él ordenó a Moisés, al lado de la zarza ardiente: ‘Quita tus zapatos de tus pies, porque el lugar en que tú estás, tierra santa es.’” Éxodo 3:5.—La Historia de Profetas y Reyes, 34. FV 190.3

“Dios es superior y santo; y para el alma humilde y creyente, su casa en la tierra, el lugar donde su pueblo se reúne para adorarle, es como la puerta del cielo.”—Mensajes para los Jóvenes, 263. FV 190.4