En los Lugares Celestiales

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Cuando la fe es probada, 20 de septiembre

Para que sometida a prueba vuestra fe, mucho más preciosa que el oro, el cual aunque perecedero se prueba con fuego, sea hallada en alabanza, gloria y honra cuando sea manifestado Jesucristo. 1 Pedro 1:7. ELC 272.1

Cuando somos conducidos a circunstancias adversas, ... nuestra fe es probada; entonces debemos manifestar la mansedumbre y la dulzura de Cristo. Ni por una palabra debemos dar expresión a los sentimientos del corazón natural. “Si alguno no ofende en palabra, éste es varón perfecto, capaz también de refrenar todo el cuerpo” (Santiago 3:2)—el hombre entero. Lo que necesitamos es estar bajo el control de Jesús. No necesitamos hacer nuestra voluntad. He escuchado a algunos argumentar como una excusa por su proceder equivocado: “Ud. sabe que así es mi temperamento, ésa es mi disposición, que heredé de mis padres”. Sí, y ellos la han cultivado, y se han educado en ella, y así disculpan todo su mal proceder. En vez de ceder a la tentación, deberían apoyarse en el brazo del Poder Infinito ... ELC 272.2

Miremos al Calvario a fin de comprender cuán grande es el amor que Cristo tiene por nosotros. Entonces conoceremos algo de la profundidad, la anchura y la altura de ese amor y veremos algo de la condescendencia de Dios y del Señor Jesucristo, cómo paso a paso descendió el Salvador al valle de humillación. No condescendió a pecar, a la contaminación, sino mantuvo en este átomo de mundo la batalla con Satanás y su hueste, y aquí ganó para nosotros una herencia inmortal... ELC 272.3

Cuando ascendió a lo alto y llevó cautiva la cautividad, y dio dones a los hombres, dejó la batalla en nuestras manos, pero no tenemos que luchar con nuestro propio poder: fracasaríamos si lo intentásemos. Cristo está presente con el Padre para traer en nuestra ayuda las inteligencias invisibles, los ángeles de Dios. Lo que necesitamos es la simplicidad de la fe, la mansedumbre y la humildad de Cristo.—The Review and Herald, 8 de marzo de 1892. ELC 272.4