El Colportor Evangélico

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Libros sacados de los estantes

Es cierto que algunos que compran los libros los dejarán en los estantes o los pondrán sobre la mesa de la sala, y rara vez los mirarán. Sin embargo, Dios cuida de su verdad, y llegará el tiempo cuando estos libros serán buscados y leídos. Puede entrar la enfermedad o la desgracia en el hogar, y por medio de la verdad contenida en los libros, Dios manda paz, esperanza y descanso a los corazones perturbados. Su amor les es revelado, y comprenden cuán precioso es el perdón de sus pecados. Así coopera el Señor con sus obreros abnegados.—Joyas de los Testimonios 2:532, 533 (1900). CE 156.2