Consejos Sobre la Obra de la Escuela Sabatica

56/199

Estudio diligente ricamente recompensado

La atenta aplicación de aquellos estudiantes hebreos [Daniel y sus compañeros] bajo la instrucción de Dios fué ricamente recompensada. Mientras hacían diligentes esfuerzos para obtener conocimiento, el Señor les dió sabiduría celestial. El conocimiento que obtuvieron fué de gran servicio para ellos cuando fueron puestos en situaciones de apremio. El Señor Dios del cielo no suplirá las deficiencias que resulten de la indolencia mental y espiritual. Cuando los agentes humanos ejerciten sus facultades para adquirir conocimiento, para llegar a ser hombres que piensen con profundidad; cuando ellos, como los mayores testigos en favor de Dios y de su verdad, hayan vencido en el campo de la investigación de doctrinas vitales concernientes a la salvación del alma, para que le sea tributada gloria al Dios del cielo como Ser Supremo, entonces jueces y reyes reconocerán, en las cortes de justicia, en los parlamentos y los concilios, que el Dios que hizo los cielos y la tierra es el único Dios vivo y verdadero, el Autor del cristianismo, el Autor de toda verdad, que instituyó el sábado del séptimo día cuando se echaban los fundamentos del mundo, cuando las estrellas del alba alababan juntas y todos los hijos de Dios cantaban al unísono pletóricos de gozo.—Fundamentals of Christian Education, 374, 375. COES 62.1