Exaltad a Jesús

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Adorad al creador, exaltad a Jesús como el creador, 6 de febrero

Adorad a aquel que hizo el cielo y la tierra, el mar y las fuentes de las aguas. Apocalipsis 14:7. EJ 45.1

El deber de adorar a Dios estriba en el hecho de que él es el Creador, y que a él todos los demás seres deben su existencia. Y cada vez que la Biblia presenta el derecho de Jehová a nuestra reverencia y adoración con preferencia a los dioses de los paganos, menciona las pruebas de su poder creador. “Todos los dioses de los pueblos son ídolos; mas Jehová hizo los cielos”. Salmos 96:5. “¿A quién pues me compararéis, para que yo sea como él? dice el Santo. ¡Levantad hacia arriba vuestros ojos, y ved! ¿Quién creó aquellos cuerpos celestes?” “Así dice Jehová, Creador de los cielos (él solo es Dios), el que formó la tierra y la hizo;... ¡Yo soy Jehová, y no hay otro Dios!” Isaías 40:25-26; 45:18 (VM). EJ 45.2

Dice el salmista: “Reconoced que Jehová él es Dios: él nos hizo, y no nosotros a nosotros mismos”. “¡Venid, postrémonos, y encorvémonos; arrodillémonos ante Jehová nuestro Hacedor!” Salmos 100:3; 95:6 (VM). Y los santos que adoran a Dios en el cielo dan como razón del homenaje que le deben: “¡Digno eres tú, Señor nuestro y Dios nuestro, de recibir la gloria y la honra y el poder; porque tú creaste todas las cosas!” Apocalipsis 4:11 (VM). EJ 45.3

En el capítulo 14 del Apocalipsis se exhorta a los hombres a que adoren al Creador, y la profecía expone a la vista una clase de personas que, como resultado del triple mensaje, guardan los mandamientos de Dios. Uno de estos mandamientos señala directamente a Dios como Creador. El cuarto precepto declara: “El séptimo día será Sábado a Jehová tu Dios: ...porque en seis días hizo Jehová los cielos y la tierra, la mar y todas las cosas que en ellos hay; y en el día séptimo reposó; por tanto Jehová bendijo el día del Sábado, y lo santificó”. Éxodo 20:10-11 (V. Valera). “Respecto al sábado, el Señor dice además, que será una señal... para que sepáis que yo soy Jehová vuestro Dios”. Ezequiel 20:20; Ibid. Y la razón aducida es: “Porque en seis días hizo Jehová los cielos y la tierra, y en el séptimo día cesó, y reposó”. Éxodo 31:17... EJ 45.4

Mientras el ser él nuestro Creador siga siendo motivo para que le adoremos, el sábado seguirá siendo señal conmemorativa de ello. Si el sábado se hubiese observado universalmente, los pensamientos e inclinaciones de los hombres se habrían dirigido hacia el Creador como objeto de reverencia y adoración, y nunca habría habido un idólatra, un ateo, o un incrédulo. La observancia del sábado es señal de lealtad al verdadero Dios, “que hizo el cielo y la tierra, y el mar y las fuentes de agua”. Resulta pues que el mensaje que manda a los hombres adorar a Dios y guardar sus mandamientos, los ha de invitar especialmente a observar el cuarto mandamiento.—el Conflicto de los Siglos, 489-491. EJ 45.5