Exaltad a Jesús

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El primer advenimiento y el segundo, 25 de diciembre

Así también Cristo fue ofrecido una sola vez para llevar los pecados de muchos; y aparecerá por segunda vez, sin relación con el pecado, para salvar a los que le esperan. Hebreos 9:28. EJ 367.1

En ocasión del primer advenimiento de Cristo... los ángeles del cielo a duras penas pudieron contener su deseo de derramar sus glorias para celebrar el nacimiento del Hijo de Dios... Ese nacimiento, para el cual no se hizo preparación en la tierra, fue celebrado en los atrios celestiales con alabanza y acciones de gracia en favor de los seres humanos. EJ 367.2

Mientras los pastores cuidaban sus rebaños por la noche en los cerros de Belén, “se les presentó un ángel del Señor, y la gloria del Señor los rodeó de resplandor”. Lucas 2:9... EJ 367.3

Los dirigentes de Israel profesaban comprender las profecías, pero habían albergado ideas falsas con relación a la forma en que Cristo vendría. Satanás los había engañado; y ellos aplicaban toda la gloria de la segunda venida de Cristo a su primera aparición. En su primer advenimiento querían ver todos los acontecimientos maravillosos que caracterizarán su segunda venida. Por esta razón, cuando vino no estaban preparados para recibirlo... EJ 367.4

Entre el primer advenimiento de Cristo y el segundo se percibirá un contraste extraordinario. Ningún lenguaje humano es capaz de describir las escenas relativas a la segunda venida del Hijo del hombre en las nubes de los cielos. Aparecerá con su propia gloria, y con la gloria de su Padre y la de sus santos ángeles. Vendrá cubierto con sus ropajes de luz, que ha tenido desde los días de la eternidad. Lo acompañarán los ángeles. Diez mil veces diez mil lo escoltarán en su venida. Se escuchará el sonido de la trompeta que llama a los muertos que duermen en sus tumbas. La voz de Cristo atravesará las tumbas y penetrará en los oídos de los muertos y “todos los que están en los sepulcros oirán su voz... y saldrán a resurrección”... EJ 367.5

Nos hallamos en medio de los peligros de los últimos días. Se observan escenas de conflictos y el día de los días está por amanecer. ¿Estamos preparados para este acontecimiento? Cada acto, grande o pequeño, será examinado. Lo que aquí se haya considerado como algo trivial, allí será visto como realmente es. Las dos blancas de la viuda serán reconocidas. El vaso de agua fría que se haya ofrecido, la prisión que se haya visitado, los hambrientos a quienes se les haya dado de comer: cada uno de estos actos recibirá su propia recompensa... EJ 367.6

La cabeza de la serpiente será aplastada muy pronto. El glorioso recordativo del poder maravilloso de Dios pronto será restaurado al sitial que le corresponde. Entonces el paraíso perdido se transformará en el paraíso restaurado. El plan de Dios para la redención del hombre quedará concluido. El Hijo del hombre colocará sobre los justos la corona de la vida eterna, y ellos “le sirven día y noche en su templo; y el que está sentado sobre el trono extenderá su tabernáculo sobre ellos”.—The Review and Herald, 5 de septiembre de 1899. EJ 367.7