La Educación

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Una lección de confianza

“Pregunta ahora a las bestias, y ellas te enseñarán; a las aves de los cielos, y ellas te lo mostrarán [...]. Los peces del mar te lo declararán también”. “Ve a la hormiga [...] mira sus caminos”. “Mirad las aves”. “Considerad los cuervos”10. ED 104.3

No solamente hemos de hablar al niño de estas criaturas de Dios. Los mismos animales llegan a ser sus maestros. Las hormigas enseñan lecciones de trabajo paciente, de perseverancia para vencer los obstáculos, de previsión para el futuro. Los pájaros son maestros de la dulce lección de la confianza. Nuestro Padre celestial hace provisión para ellos, pero ellos deben buscar su alimento, construir sus nidos y criar a sus hijos. Constantemente están expuestos a los enemigos que tratan de destruirlos y, sin embargo, ¡con cuánto gozo realizan su trabajo! ¡cuán alegres son sus cantos! ED 104.4

Es hermosa la descripción que hace el salmista del cuidado de Dios por las criaturas de los bosques: ED 105.1

“Los montes altos para las cabras monteses;
Las peñas, madrigueras para los conejos”11.
ED 105.2

Él hace correr los manantiales por las montañas donde los pájaros tienen su habitación y “cantan entre las ramas”. Todas las criaturas de los bosques y de las montañas forman parte de su gran familia. Él abre la mano y satisface “de bendición a todo ser viviente”12. ED 105.3