Consejos sobre Mayordomía Cristiana

125/353

“Negociad entre tanto que vengo”

Dios, en su ausencia, nos ha encargado de sus bienes. Cada mayordomo tiene su propia obra específica que debe hacer para promover el reino de Dios. A nadie se excusa. El Señor nos pide a todos: “Negociad entre tanto que vengo”. Lucas 19:13. De su propia sabiduría nos ha dado instrucciones para el empleo de sus dones. Los talentos del habla, la memoria, la influencia, las propiedades, deben amontonarse para la gloria de Dios y la promoción de su reino. El bendecirá el uso debido de esos dones. CMC 122.4

Pretendemos ser cristianos que esperan la segunda venida de nuestro Señor en las nubes del cielo. ¿Qué haremos entonces con nuestro tiempo, nuestra comprensión y nuestras posesiones, los que no nos pertenecen, sino que nos han sido confiados para probar nuestra honradez? Llevémoslos a Jesús. Utilicemos nuestras riquezas para el adelantamiento de su causa. En esa forma obedeceremos esta orden: “No os hagáis tesoros en la tierra, donde la polilla y el orín corrompen, y donde ladrones minan y hurtan; sino haceos tesoros en el cielo, donde ni la polilla ni el orín corrompen, y donde ladrones no minan ni hurtar. Porque donde esté vuestro tesoro, allí estará también vuestro corazón”. Mateo 6:19-21.—The Review and Herald, 9 de abril de 1901. CMC 122.5