Mensajera del Señor

327/499

Qué significaban y qué significan

Aquí se nos recomienda que estudiemos (1) qué “significaban” las palabras del Señor en el año 30 d.C., y (2) qué debiéramos entender que “significan” para nosotros hoy. Ese estudio debe seguir las reglas de hermenéutica si dos o más personas han de concordar sobre qué “significaba” un documento originalmente y qué “significa” hoy.3 Además, el blanco de la hermenéutica no sólo es entender lo que un autor quiso decir sino asegurarse de que no es mal entendido.4 MDS 372.4

He aquí algunas reglas básicas de hermenéutica: MDS 372.5

• Si un documento está en un idioma extranjero, se necesita un conocimiento de ese idioma, incluyendo una comprensión de la estructura y las expresiones idiomáticas de ese idioma. Aunque esto es especialmente cierto respecto a la Biblia con sus documentos hebreos, arameos y griegos, la comprensión de las expresiones idiomáticas y peculiaridades del inglés norteamericano del siglo XIX es útil para entender a Elena de White. El cono-cimiento dado meramente por un diccionario no es suficiente. MDS 372.6

• Debe reconocerse el tipo de forma literaria, ya sea prosa o poesía, profecía o historia, alegoría o parábola, etc. Tanto la Biblia como los escritos de Elena de White requieren este tipo de conocimiento. MDS 372.7

• Antes que puedan extraerse deducciones correctas debe comprenderse el contexto histórico, incluyendo el tiempo preciso cuando fue escrito el texto, especialmente si el documento trata de asuntos de ética, interrelaciones con poderes civiles contemporáneos y patrones de pensamiento prevalecientes. Para entender la Biblia y los escritos de Elena de White, los estudiantes deben ser conscientes del contexto histórico. MDS 372.8

• Es útil un conocimiento de los factores climatológicos y geográficos que influyeron sobre el escritor. Mucho de la Biblia, por ejemplo, sería oscuro sin un conocimiento de las condiciones geográficas de Palestina y el impacto de su clima. Gran parte de las observaciones y consejos de Elena de White resul- tan más comprensibles cuando reconocemos estos factores. MDS 372.9

• A fin de pensar como el escritor y “oír” como sus oyentes, debemos en la actualidad tratar de “ver” lo que ellos vieron y “oír” lo que ellos oyeron. Debemos aprender todo lo que podamos sobre el carácter y la personalidad del autor como también sobre la interacción personal general de las personas a las que se hace referencia en el documento que se está estudiando. MDS 373.1

• Los lectores deben descubrir qué sig nificaban las declaraciones bíblicas para los contemporáneos del profeta antes de concentrarse en lo que debieran significar actualmente. Esto protegerá a los estudiantes de “ver” en la Biblia sólo lo que ellos están buscando.5 MDS 373.2

• En el estudio de la Biblia, aceptamos la comprensión bíblica implícita de que el Antiguo y el Nuevo Testamentos juntos forman un canon que contiene el registro de la única revelación de Dios a los seres humanos. De esa manera la Biblia es su propio mejor intérprete que provee un contexto teológico unificador para la comprensión de cualquier capítulo y versículo en particular. Este mismo principio de unidad y coherencia ayudará a los estudiantes a entender más claramente la totalidad de los pensamientos de Elena de White.6 MDS 373.3

Este desafío para comprender lo que la Biblia significa no es un fenómeno moderno. Temprano en los tiempos del Nuevo Testamento surgió la necesidad de interpretación con la pregunta de Felipe al etíope: “¿Entiendes lo que lees?” MDS 373.4

Y el etíope dijo: “¿Cómo podré, si alguno no me enseñare?” (Hech. 8:30-31). Aquellos que siguen fielmente los principios de interpretación (hermenéutica) cumplen mejor el papel de guías. MDS 373.5