Elena De White: Mujer De Visión

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LA GUERRA DEVASTADORA TERMINA REPENTINAMENTE

Pero repentinamente ocurrió un cambio. El 9 de abril el general Robert E. Lee se rindió en el edificio del Tribunal de Justicia de Appomattox, en Virginia. La guerra virtualmente había terminado. Debían sofocarse algunas actividades bélicas más al sur y al oeste, pero el 11 de abril, dos días después de la rendición de Lee, Uriah Smith, el director de la Review and Herald, reconociendo la respuesta visible a la oración, escribió lo siguiente: MV 98.2

Ven en el panorama no sólo los efectos inmediatos que otros ven, la cesación de la masacre y el derramamiento de sangre,... sino que ven en ello un cumplimiento de la profecía, una respuesta a la oración, una señal luminosa de que el gran Pastor de Israel está yendo delante de su rebaño. Por lo tanto, agradecemos a Dios por la manifestación visible de su mano en nuestros asuntos nacionales (Id., 11 de abril, 1865). MV 98.3

Una semana más tarde, Smith se refirió al amplio reconocimiento de la mano providencial de Dios en los asuntos de la nación: MV 98.4

Es justo y apropiado que Dios sea reconocido en la gratitud nacional, porque él es quien ha dado la victoria. Pero ver un reconocimiento tan general desde el funcionario bajo su sello de autoridad hasta el ciudadano más humilde, es más de lo que podría haberse esperado (Id., 18 de abril, 1865). MV 98.5

El reconocimiento de la providencia de Dios en la rápida terminación de la guerra fue aceptado en forma muy generalizada. A los lectores de la Review se les informó de un elemento significativo aparecido en el American Missionary de abril, llamando la atención al MV 98.6

fuerte elemento religioso en el regocijo sobre nuestras victorias. El hecho de atribuirle a Dios nuestros grandes éxitos era algo casi universal. En los altos sitios del país y en los centros comerciales más ocupados, como también en las iglesias y en tomo a los altares domésticos de las familias cristianas, fue manifiesto el mismo piadoso reconocimiento. La brillante transparencia en el Capitolio en Washington, “Es obra del Señor y es algo maravilloso en nuestros ojos”, y la multitud descubierta en Wall Street uniéndose reverentemente en oración y cantando la doxología cristiana, eran hechos raros pero representativos (Id., 6 de junio, 1865). MV 98.7

La Guerra Civil terminó demasiado pronto como para probar bien las provisiones hechas por el gobierno para proporcionar alivio a los adventistas que habían sido reclutados. Pero en la Primera Guerra Mundial y en situaciones militares subsiguientes, los pasos dados en 1864 y 1865 prepararon el camino para aliviar la situación de los adventistas en las fuerzas armadas. MV 99.1

¿Y cuál era el significado de una ley del Congreso que disponía que toda nueva matriz hecha en la Casa de la Moneda de los Estados Unidos debía llevar el lema, “En Dios Confiamos”? MV 99.2

La tendencia favorable indujo a Jaime White a apelar a la iglesia: MV 99.3

La retención de los vientos [manifestada] en la supresión de la rebelión, superando aun nuestra fe en el carácter repentino de su ejecución, está abriendo ante nosotros una puerta amplia. Que los miles de observadores del sábado cuya oración ascendió hace dos meses pidiendo el rápido cumplimiento de esta obra, ahora contestada en forma tan señalada, nuevamente la eleven para que el gran Capitán de los ejércitos del Señor se encuentre con su pueblo (Ibíd.., 9 de mayo, 1865). MV 99.4

Y en la reunión anual de la Asociación General en mayo se aprobó y registró una resolución: MV 99.5

Resuelto, Que reconozcamos, con gratitud devota, la mano de Dios en este evento, como una respuesta directa a la oración, y que en vista de las mayores responsabilidades depositadas sobre nosotros al abrirse nuevamente el camino para el progreso del mensaje, nos consagremos de nuevo solemnemente a esta gran obra a la que Dios nos ha llamado (Id., 23 de mayo, 1865). MV 99.6