Elena De White: Mujer De Visión
LOS ASUNTOS ADMINISTRATIVOS DEL CONGRESO
La consideración de los asuntos administrativos del congreso comenzó propiamente el lunes de mañana a las 9:30. Después de pasar lista a los delegados, el presidente, el pastor Daniells, dio su discurso. En sus observaciones iniciales habló del funcionamiento eficiente de las uniones asociaciones y observó: “Muchos hombres están ahora adquiriendo la experiencia de llevar cargas lo que previamente estaba reservado comparativamente a unos pocos” (GCB 1903, p. 18). MV 444.1
Luego presentó la situación financiera muy difícil en la que se encontraba la denominación, y el hecho de que la seguridad de sus instituciones había mejorado. Hablando de la dirección de Dios a través del espíritu de profecía, declaró que “otra fase de la reforma a la que este pueblo fue llamado era la de levantarse y alejar la deshonra de la deuda que descansaba tan pesadamente sobre ellos” (Ibíd.). La Asociación General había estado operando sobre la base de dinero en efectivo, informó Daniells, y había reducido las deudas de la denominación en $250.000 (Id., p. 19). La feligresía mundial a fin de 1902 era de 67.000 miembros (Id., p. 120). MV 444.2
La primera propuesta que se colocó ante la Asociación General fue significativa y de largo alcance: MV 444.3
Que el pastor A. G. Daniells, presidente del Comité de la Asociación General, sea instruido, y lo es por este medio, para que designe un comité de cinco a fin de examinar la condición financiera de todas nuestras diversas instituciones, y para investigar su relación con la denominación Adventista del Séptimo Día, y para idear y recomendar a este congreso algún plan por medio del cual todas las instituciones, hasta tanto sea posible bajo las leyes existentes de la corporación, sean colocadas bajo la posesión, control y administración directa de nuestro pueblo (Id., p. 21). MV 444.4
La propuesta fue directa al punto y destacaba el trabajo importante que debía abordarse en la sesión. Fue referida a la Comisión de Planes, para que fuese traída a la sesión en la forma apropiada. Pero otro asunto que amenazaba a la causa acechaba en las tinieblas: el panteísmo, propagado por el Dr. Kellogg y sus asociados. MV 444.5
Las reuniones administrativas de la sesión de la Asociación General habían sido liberadas de muchos de los detalles que se habían presentado en sesiones previas, de modo que había tiempo para discutir dos asuntos importantes: la posesión de las instituciones, y la nueva constitución bajo la cual los principales oficiales serían elegidos por los delegados. Unos pocos días después de la apertura del congreso, el Comité sobre Planes y Constitución sometió un informe parcial, recomendando: MV 445.1
“Que las oficinas de la Asociación General sean sacadas de Battle Creek, Michigan, y trasladadas a algún lugar favorable para su trabajo en los estados cercanos al Atlántico” (GCB 1903, p. 67). MV 445.2
Cuando el Dr. Kellogg ocupó el segundo domingo de tarde del congreso con su reseña de su experiencia con el Sanatorio de Battle Creek, de a momentos se dijeron algunas cosas más bien hirientes. Después de un largo debate, se tomó el siguiente acuerdo en cuanto al control de las instituciones: MV 445.3
Todas las instituciones creadas directamente por el pueblo [la hermandad] a través de la Asociación General, la Unión Asociación, la Asociación estatal, o la organización de un campo misionero, han de ser propiedad del pueblo, mediante éstas u otras organizaciones según el pueblo pueda designar (Id., p. 223). MV 445.4