Elena De White: Mujer De Visión
EL TRATAMIENTO EXITOSO DE UN CASO MUY CRITICO
La pequeña institución de salud, que estaba luchando por progresar, pronto demostró su valor cuando el Prof. Herbert Lacey, que se había enfermado seriamente durante una visita para promover la escuela en Tasmania, fue tratado y recuperó su salud. El viernes 28 de febrero, Lillian, su esposa, recibió un telegrama en Cooranbong diciendo que Lacey, desesperadamente enfermo, llegaría por tren a Sydney ese día. Lillian se apresuró a ir a Sydney y llegó justamente cuando su esposo estaba arribando desde Melbourne. Fueron inmediatamente a la Casa de Salud, donde se pensó que el suyo era un caso de fiebre tifoidea. Había perdido 9 kilogramos (20 libras) en una semana, y su esposa escribió que estaba “muy frágil, nada sino piel y huesos”. MV 354.2
En la Casa de Salud, el Sr. Semmens se unió a los pastores Haskell y Baker para orar por la recuperación de Lacey (Carta 189, 1897). Semmens comenzó a usar tratamietos hidroterápicos. Lillian le informó al padre de su esposo, que residía en Cooranbong, que “el Hno. Semmens estaba usando hielo en sus intestinos” (Ibíd.). Su vitalidad era baja, y cuando Elena de White se enteró del remedio de hielo, se apresuró a enviarle un telegrama a Semmens: “No use hielo, sino aplicaciones calientes” (Ibíd.). Por supuesto que había una razón para esto, como ella le explicó en una carta a W. C. White: MV 354.3
En varios casos se me había dado luz indicando que el remedio del hielo no era tan eficaz como el agua caliente. Tenía temor. Me enteré que su vitalidad era muy baja y yo sabía que ponerle hielo en la cabeza y en el pecho era un error. Drenaría su vitalidad... MV 354.4
No debía correrse ningún riesgo en el caso de Herbert. No iba a ser tan delicada en lo que se refiere al médico como para permitir que la vida de Herbert Lacey se extinguiera... Podría haber casos en los que las aplicaciones de hielo diesen buen resultado. Pero los libros con prescripciones que son seguidas al pie de la letra respecto a aplicaciones de hielo deberían tener explicaciones adicionales, indicando que personas con vitalidad débil debieran usar el calor en lugar del frío... MV 354.5
Los fomentos calientes cuando hay fiebre eliminarán la inflamación en nueve casos de cada diez, cuando las aplicaciones de hielo, de acuerdo con la luz que se me ha dado, drenarían en forma peligrosa la vitalidad. Aquí es donde está el peligro de no usar el juicio y la razón en relación con la persona bajo tratamiento (Ibíd.). MV 354.6
Una semana más tarde, al informarle a su hijo sobre el asunto, ella mencionó los pasos que se estaban tomando en conexión con la enfermedad de Lacey: MV 355.1
El caso es crítico, pero creo que el Señor lo levantará. Estamos orando por él. Se está haciendo por él todo lo posible... El Hno. Semmens dedica todo su tiempo al enfermo, y tienen allí al Dr. Deek, quien está observando el caso de los métodos higiénicos del tratamiento con gran interés. Dice que está progresando tan bien como posiblemente podía hacerlo bajo este ataque (Carta 181, 1897). MV 355.2
En su diario ella mencionó lo siguiente: MV 355.3
Hemos hecho de su caso [el de Lacey] un objeto especial de oración. Cada día le hemos escrito unas pocas líneas para llamar su atención a lo que el Señor estaba listo y dispuesto a hacer por él. Los ángeles de Dios han dirigido todo lo concerniente a él a lo largo de su enfermedad (Carta 172, 1897). MV 355.4
Elena de White se alegró cuando el viernes 9 de abril pudo enviar su carruaje a la estación de ferrocarril para recibir a Herbert Lacey y su esposa. Ella informó: “Él se está sintiendo realmente bien y tiene la intención de ocuparse en la escuela al comienzo [del año escolar]. Estoy tan contenta”. MV 355.5
Pero fue en el invierno de 1898 cuando las diversas ramas de la obra médicomisionera realmente comenzaron a desarrollarse en Australia. Un motivo de preocupación era el de las prioridades en el uso de los fondos disponibles. Al responder en junio a preguntas formuladas por A. G. Daniells, presidente de la Unión Asociación, Elena de White enunció dos principios: MV 355.6
Todos debieran estar de acuerdo antes de que decidamos cómo se asignarán los medios. Es necesario que veamos cuál es nuestra situación financiera en todas nuestras ramas de trabajo (Carta 52, 1898). MV 355.7
En junio ella informó: “La Casa de Salud está llena... Vemos un gran número de personas que carecen de conocimiento sobre cómo cuidarse a sí mismas. Sentimos un gran deseo de que avance la obra” (Carta 56, 1898). Luego vino un informe que indicaba que se estaba progresando, publicado en el Union Conference Record del 15 de julio. MV 355.8
Aquellos de nuestro pueblo que leen el Herald of Health... habrán notado que la “Casa de Salud” de Sydney ha cambiado su nombre. De aquí en adelante esta institución será conocida como el “Sanatorio Médico y Quirúrgico” de Summer Hill. MV 355.9
Esto no es sólo un cambio de nombre. Toda la institución ha sido colocada sobre un plano científico más elevado; en realidad, un plano propio de un sanatorio. MV 356.1
Un médico se ha encargado del trabajo médico y quirúrgico... Un químico y microscopista plenamente competente está al frente de un nuevo laboratorio de investigación completo. Se están agregando gimnasia médica y otras instalaciones especiales para ayudar en la recuperación de los enfermos. MV 356.2