Elena De White: Mujer De Visión
CAPITULO 13— TIEMPO PARA UN CARÁCTER MÁS APACIBLE
A medida que el trabajo se multiplicaba, Elena y Jaime enfrentaban el problema de dónde deberían invertir en forma más provechosa su tiempo y sumar su presencia. No podían estar en Battle Creek y California al mismo tiempo. No podían estar en Nueva Inglaterra e iniciar la obra en Texas y Kansas. No es de sorprenderse que en su viaje en la caravana Elena se preguntase: “¿Era necesario todo esto y correspondía a la línea del deber?” Y no es de asombrarse que Jaime preguntase vez tras vez: “¿Dónde están los hombres para hacer el trabajo?” MV 207.1
No habían estado en el Oeste desde 1878. Ahora estaban llegando informes provenientes de California que desde que Loughborough había sido asignado al trabajo recientemente iniciado en Inglaterra, no se había hecho debida provisión para la obra en crecimiento en el Oeste. Se necesitaba ayuda. Se pensó que era aconsejable enviar a S. N. Haskell y W. C. White para que pasasen unos pocos meses en California. MV 207.2
Dos semanas más tarde estos hombres, acompañados por Elena de White, estaban en camino a California. MV 207.3
Jaime quedó en el Este para atender los muchos deberes administrativos que había aceptado con buena voluntad en la sesión de la Asociación General, para pastorear la iglesia y para promover asuntos relacionados con publicaciones como la publicación de Life Sketches of James and Ellen White (Notas biográficas de Jaime y Elena White). MV 207.4
Después de su llegada a Oakland, Elena se dedicó de lleno al programa de fortalecer la iglesia. Ese primer sábado habló en la iglesia de Oakland, y los miembros de San Francisco fueron invitados a asistir. MV 207.5
Se planearon dos campestres para las postrimerías de la primavera en la Asociación del Norte del Pacífico, la que abarcaba el Estado de Oregon y el territorio de Washington. El primero iba a ser al este de las montañas Cascade en Milton, del 20 al 31 de mayo; el segundo, al oeste de las montañas, del 9 al 15 de junio, en la vecindad de Salem. “La Sra. E. G. de White estará presente en nuestros dos campestres —decía la noticia en el número de Signs of the Times del 22 de abril—. Será una oportunidad sumamente favorable para que todos nuestros hermanos y hermanas puedan conocerla, y reciban la instrucción va liosa que ella puede dar”. Después de luchar algunos días con la cuestión del viaje propuesto, ella le escribió a Jaime: MV 207.6
Si el Señor me coloca la carga, debo ir no importa cuán desagradable pueda considerar el asunto. No quiero avanzar un paso más allá de lo que el Señor me dirija por su Espíritu Santo. A veces temo que es un pavor cobarde que siento por el agua lo que hace que no me decida a ir inmediatamente a Oregon. Pero me propongo no examinar mi voluntad sino la voluntad de Dios... Oh, tiemblo por mí misma, no sea que después de haber predicado a otros, “yo misma venga a ser reprobada” (Carta 22, 1880). MV 208.1
El Señor en verdad colocó la carga sobre ella. Tres días más tarde escribió: “Iré a Oregon el 6 de mayo; quedaré dos meses a menos que vea una luz más clara [en otro sentido]” (Carta 24,1880). Hizo el viaje, acompañada por Mary White y S.N. Haskell. Viajaron desde San Francisco en el vapor California, el jueves 6 de mayo, llegando a Portland el domingo de mañana, 9 de mayo (ST, 13 de mayo, 1880). Luego se apresuraron a remontar el río Columbia hasta el este de Oregon y Walla Walla. Por unos pocos días ella y Haskell celebraron reuniones allí, hablando el sábado y el domingo, 15 y 16 de mayo. Ella también habló tres noches en Walla Walla. Siguieron otras reuniones: una en Milton, Oregon, y otra en Salem. Haskell luego regresó a California. Elena y Mary quedaron unos pocos días más. Entre las reuniones ella estaba ocupada escribiendo. MV 208.2